viernes, 30 de marzo de 2012

Me ahogo en sangre


Su mirada se aleja de la mía, no quiero que se vaya, así que sostengo su mano con brusquedad, su piel es cálida y mi pulso se acelera, mi respiración se entrecorta, no se que hacer, ella espera que diga o haga algo, bajo la mirada, no puedo mirarla a los ojos mientras dudo, que puedo hacer, decirle que la amo, que no quiero perderla, que no puedo ni quiero afrontar la vida sin ella, ¿Servirá de algo?. No pierdes nada con intentarlo y te maldices por no ser mas inteligente, por no poder exprimirle a tus sesos una respuesta mas adecuada, tal vez diciendo las palabras adecuadas todo se solucionaría o al menos el proceso seria menos doloroso, pero este no es el caso, nunca fuiste muy elocuente con las palabras, esto es todo lo que tienes una frase triste y patética: “Te quiero y no quiero que te vallas, ¿Por qué eso no es suficiente para que te quedes?”.

La vuelves a mirar a los ojos y abres tus labios para pronunciar las únicas palabras que te vinieron a la mente, pero ella es mas rápida y decidida que tu, se te acerca velozmente y te da un fuerte abrazo, te arranca las palabas de los labios, su cercana presencia arranca la voz de tu garganta y la derrite con su calor. Tu la rodeas lentamente con tus brazos, acercas suavemente el rostro a su pelo y hueles su perfume, inhalas profundamente, pausadamente, quieres grabar el recuerdo de su olor en tu mente, el suave tacto de su piel en tus brazos, jamás quieres olvidarlos, de ser posible tu mismo te sacarías el cerebro y tatuarías con fuego cada detalle del momento en la región correspondiente. Pero solo puedes concentrarte, concentrar todos tus sentidos en este momento, abandonar tu conciencia y dejar que tus instintos vivan por ti, para no dejar que el pensamiento cuente el tiempo, para no sentir el flujo de los segundos, para no sentir cuando el final se acerque, convertir este fragmento de tiempo en algo infinito, poder sentir la forma del espacio y el tiempo, poder moldearlos con las manos, estirar esta única burbuja de existencia y expandirla, hacerla tan grande como el universo, crear un nuevo cosmos con este momento, que este instante ocupe todo el espacio y todo el tiempo de este nuevo universo, que solo exista congelado, inmóvil, inerte, eterno, sin imperfecciones ni perturbación alguna, solo la mera existencia de un momento hermoso que debe preservarse por la eternidad.

Pero por más que intente separarme del universo, mi existencia sigue clavada a el, inseparable y sin remedio. El tiempo sigue su curso inexorable y ella se separa lentamente de mí, me aparta tiernamente con sus brazos, me da la espalda y comienza a alejarse lentamente, el sonido de sus zapatos resuena en mis oídos, cada eco representa la maldición de esta perdida, la desdicha, el sufrimiento. Se detiene un momento, se da la media vuelta y dibuja un cálida sonrisa en su rostro, para después salir corriendo hasta perderse de mi vista. Ya no esta, se fue, pero esto esta bien, ya no tengo miedo, no se puede detener el inexorable paso del tiempo, así es como deben ser las cosas, siempre deben mirar hacia delante y sin detenerse, justo como ella se fue después de sonreírme. Estaré bien, lo se con seguridad, aunque no tenga idea de que hacer en este momento o en el siguiente. Solo permanezco parado contemplando el lugar donde su figura permaneció en mis pupilas por última vez, sintiendo a un el tacto de su cuerpo en mi pecho, apretando entre mis manos un cuerpo imaginario que ya no existe. 

Estaré bien, vuelvo a decirme, pero eso será en el futuro, porque ahora solo quiero llorar, llorar y que las lagrimas se lleven el tacto que dejo en mi interior, que laven el sufrimiento, que se lleve el dolor, desahogar mi espíritu ahogado por el liquido lechoso que escurre al romperse un corazón, ese liquido espeso y caliente, que no deja de fluir, de acumularse en los pulmones de mi alma, necesito sacarlo y entonces comienzo a vomitarlo, me escurre por la garganta y las fosas nasales, gotea por los conductos lagrimales de mis ojos, por cada poro de mi piel, comienza a fluir por mi cuerpo, empapa mi ropa, me quita el aire, caigo de rodillas, comienzo a dar arcadas y sigo vomitando.

 Finalmente se detiene, caigo de costado, en un charco enorme de un líquido viscoso, tibio y rojo, estoy totalmente mojado con este líquido, mi cuerpo esta embebido con una fina capa de esta disolución, por tanto he tomado su forma, su color y su olor, desde una vista aérea no podría distinguirse mi cuerpo del de la mancha, al menos respiro mejor, me siento mas ligero, ya no siento que moriré aplastado por el propio peso de mi alma, la piedra que lastraba se volvió líquida y acabo de arrojarlo. Bien, me digo a mi mismo, un problema menos, ahora solo tengo que conseguir un corazón nuevo.

jueves, 29 de marzo de 2012

¿Y si pudieras? ¿Que cambiarias?

– Dime, si una especie de dios apareciera de repente y te dijera, te doy la oportunidad de volver a vivir tu vida una vez más, desde cero, comenzar de nuevo, nacer una vez más. ¿Aceptarías la oportunidad? ¿Volverías a vivir tu vida de la misma forma? –  

­Es lo que me pregunto Diana, mientras estábamos recostados en el pasto que se encontraba atrás del edificio de medicina. El cielo estaba nublado y amenazaba con llover de un momento a otro, así que prácticamente estábamos solos. Contemplábamos el movimiento turbulento de las nubes y disfrutábamos el viento húmedo que acariciaba nuestro rostro. 
 
Permanecí un rato en silencio meditando la respuesta, pensando en lo que iba a decirle.

–Pues eso depende de las condiciones que imponga el supuesto dios a su oferta–
– ¡¿Condiciones?!­­–pregunto, extrañada y sorprendida
–Si, condiciones, siempre hay condiciones, limites que no puedes cruzar, reglas que seguir–  
–No hay condiciones, este supuesto dios es omnipresente y todopoderoso, te esta ofreciendo esta oportunidad por que quiere, por pura generosidad, no tiene segundas intenciones, secretos de por medio, ni un precio que cobrarte. Es una oferta limpia, que no implica peligro alguno a tu alma o a tu ser mortal –
–Bien, en ese caso aceptaría, pero con ciertas condiciones–
–Mmmmm, parece que te gusta complicarte las cosas, tienes alguna fijación con las condiciones ¿o algo a si? –
–No, no en especial, ¿A que te refieres exactamente?­–
–No se precisarlo… es como si siempre llevaras una carga encima o algo por el estilo, algo que te hace parecer serio y sombrío. Eso es, cargas una sombra, debajo de la cual te ocultas, huyendo de la luz temiendo que esta evapore tu escondrijo–

Gire la cabeza y la mire a los ojos, seguía contemplando las nubes con sorpréndete atención, daba toda la sensación de no reparar en mi, ni de mantener una conversación conmigo. Vuelvo a mirar las nubes. Ese comentario no era a lo que me refería, no tiene nada que ver esto con lo otro y descuadro completamente el hilo de la conversación.

– Tienes razón– le dije secamente.
–Y ¿Cuales son esas condiciones? – Me pregunto después de un momento de silencio.
–Pues solo es una condición–
– ¿Cuál? –
–Que al renacer a un recordara mi vida anterior–
–Y eso ¿Para que? –
–Me gustaría volver a vivir mi vida, pero no de la misma manera, hay partes que no quiero ni recordar, ni volver a vivir, otras que repetiría exactamente igual y otras que me gustaría modificar. Para hacer eso necesito mi memoria anterior, si no fuera de esa manera no valdría la pena volver a nacer para solo vivir exactamente lo mismo, sin tener la conciencia de que estas volviendo a vivir, solo seria tiempo perdido, una serie de hechos repetidos, una película aburrida que estas obligado a ver por segunda vez –
– ¿A si que no volverías a vivir tu vida de la misma manera? –
– No, cambiaria muchas cosas–
– ¿Cómo que? –
– No lo se exactamente, supongo que lo sabría al momento de encontrármelas de frente, pero ahora en este momento, pensar detalladamente en cada cosa que cambiaria de mi vida si tuviera la oportunidad, seria desgastante y absurdo, no tiene sentido pensar en ese tipo de cosas, es una ofensa a tu ser, un signo obvio de odio a ti mismo–

Volvió a caer el silencio entre nosotros.

– Que complicado eres, yo la volvería a vivir exactamente igual, sin más y sin menos–
–Y tú eres muy simplona–

lunes, 26 de marzo de 2012

Reflexiones sobre la almohada



En una habitación, de una casa, de una familia de clase media, duerme sobre su cama una chica hermosa de piel clara y cabello oscuro, tendrá entre 18 y 20 años. No hay ventanas y la habitación esta totalmente a oscuras, así que no podemos saber ni intuir de alguna manera la hora, puede que este durmiendo sus horas normales de sueño como también puede que este durmiendo una simple siesta. El asunto es que esta durmiendo profundamente recostada sobre su hombro derecho, con la cabeza sobre una almohada de plumas de ganso tan blanca como el jabón neutro recién comprado.

En apariencia tiene una piel hermosa, y la tiene, una piel suave, tersa, al parecer sin imperfecciones, pero si comenzamos a acercarnos poco a poco a su piel, nos acercamos tanto como se acercaría un microscopio electrónico, podemos ver el mundo microscópico donde el órgano mas grande del ser humano pierde su forma humana y se convierte en un amasijo amorfo de células muertas tan grande y basto como un desierto inmenso de proporciones cósmicas. Con esta nueva perspectiva podemos ver cada detalle de la piel cada hendidura, cada línea perfectamente trazada que traza la frontera entre una célula y otra, podemos contemplar los poros como inmensos ojos vacíos de profundidad inimaginable, podemos ver las imperfecciones que se trazan como rasguños gigantescos que abarcan varias células y sobre todo podemos ver escamas de piel que están apunto de desprenderse de la demás piel muerta, son como hojas secas en otoño, literalmente, tanto en forma como en color, hojas amontonadas una sobre otra que al menor movimiento caen de repente como si un impulso de espontaneidad las hubiera embriagado y decidieran tirarse al vacío sin mas.

Las escamas de piel muerta caen lentamente en la oscuridad, recorren un largo camino desde su mejilla de origen hasta la blanca almohada donde se encuentran dos ácaros rechonchos sentados, el uno junto al otro, en una de las fibras blancas que tejen la almohada blanca. Los dos son amigos desde que tienen memoria y están ahí sentados esperando que una escama les caiga en la cabeza para poder comer. Platican afablemente sobre las recién llegadas acaras extranjeras que venían a lomos de la nueva mascota de la familia. Sobre eso hablaban cuando de repente uno de ellos sintió un golpe en la cabeza, era una escama de un tamaño considerable, la tomo entre sus patas y la partió a la mitad, le entrego la mitad a su compañero, este le dio las gracias  y comenzaron a comer piel muerta. Entre mordiscos y con la boca llena de comida uno de ellos comento.
– Hoy tiene un sabor extraño, ¿no crees? –

– Si, parece que volvió a cambiar de crema –

– Si, eso parece, me gustaba la anterior, sabor coco con un ligero toque de canela –

Si, era buena – y le da otro mordico a la escama saboreándola con mas atención – realmente tiene un sabor extraño nada que haya probado hasta ahora.

El otro acaro también saborea su porción – Pues no se tiene un sabor dulzón-picante-amargoso que me recuerda aquella tarde en que la chica se tiño el pelo, recuerdas, durante una semana la comida apesto a amoniaco –

– ¡Oh! si, como olvidarlo, fue una semana horrible – y vuelve a darle un mordisco – aunque…, no sabe tan mal sabes, a mi me recuerda al día en que volvió de la playa toda quemada, la comida estaba tostada y crujiente, sabia deliciosa y cuando comenzó a despellejarse tuvimos comida para reventar durante semanas.

– ¡Si!, fue una gran temporada, pero a mi no me sabe también, es mas como una sensación tranquila, relajante pero pasajera, nada del otro mundo –

–  Recuerdas aquella vez que le dio por hacer sus propias cremas, la  crema de nopal con papa era particularmente extraña, no era desagradable, pero su sabor era inclasificable, no sabias si era buena o mala, era algo extraño sabes, no saber si te gusta algo o no, hasta que tu me dijiste que sabia a la sensación que tienes cada vez que tu novia te rasca la espalda con sus tenazas, entonces pensé enserio sabe también y a partir de aquel momento, mientras saboreaba la comida, mas me parecía que tenias razón hasta que termino por encantarme, pero y si me hubieras dicho que sabia tan mal como las cacas de mosca en verano ¿Aquel nuevo sabor me hubiera disgustado tanto como a ti? –

– Estas insinuando que tengo una especie de superpoder de persuasión –

– Claro que no, estoy diciendo que, tal vez, ante la indecisión mi inconciente tomo tu idea como valida y yo poco a poco la fui aceptando como verdadera, es decir, que la idea que yo tenia de que aquel trozo de piel supiera tan bien fue injertada en mi cerebro por ti y no nació por si misma espontáneamente en el interior  de mi conciencia –

– Oye no crees que me estas dando demasiado poder, como puedo influir de tal manera en tu forma de pensar –

– y ¿Por qué no puede ser?, no me refiero solo a ti, si no en general, que tal si las ideas de los demás influencian directamente a las personas que los rodean sin que ellos mismos se den cuenta y en consecuencia toman acciones que creen son suyas pero en realidad son de otras personas, lo que significa que nuestras acciones son el designio de otras personas y no de nuestra propia voluntad, lo que nos lleva a decir que el libre albedrío es una simple ilusión –

– Ooookay, te estas poniendo paranoico otravez, y ya sabes lo que pasa cuando te pones paranoico –

– Si, me sube la presión. Pero no puede evitarlo cada vez que una idea llama mi atención comienzo a darle vueltas y más vueltas, hasta que se enreda completamente en mi cabeza y ya no puedo sacarla –

– Bueno talvez no deberías darle tantas vueltas a las cosas, debe ser desgastante además de que yo no le veo mucha utilidad que digamos, porque no te relajas y disfrutas de las cosas, que necesidad hay de buscarle los porqués a cada cosa, es una búsqueda frustrante y sin final, comprender porque se cae la piel no te ayudara a disfrutar mas de tu comida, así como no te ayudo a superar tu miedo a las pulgas el saber que estas se alimenta de sangre perforando la piel con unos enormes tubos –

– Si, tal vez tengas razón, ahora le tengo mas miedo a las pulgas. Creo que mejor me relajare y disfrutare de la vida comiendo este pedazo de piel muerta de sabor extraño –

– Eso es, comamos tranquilamente, contemplando en toda su extensión los curvilíneos bordes que se dibujan en la superficie inmensa de la almohada en la que vivimos, a que el paisaje es hermoso ¿no es cierto? –

– Si, lo es –

Y los dos ácaros se quedan en silencio contemplando el mar de tela de color blanco que conforma todo su universo, es como un desierto inabarcable con dunas enormes que se alzan sobre toda la superficie, es un paisaje intimidante y tranquilizante a la vez, ciertamente es hermoso.

De pronto uno de los ácaros cambia de expresión, la típica expresión que ponemos cuando se nos ocurre una idea obvia, pero que nos sorprende por su naturaleza de ser obvia.

Gira su cabeza y le dice a su compañero, con una voz marcada por la ironía.

– Te das cuenta de lo que acaba de pasar, ¿Verdad? –

miércoles, 14 de marzo de 2012

¿Cómo hacen las cigüeñas los bebes?


– Tío, ¿De donde vienen los bebes? – Es lo que me pregunta mi sobrino de 7 años, mientras leo un cómic de Batman en la hamaca del jardín de mi padre, hoy es su cumpleaños a si que toda la familia se ha reunido ha celebrarlo.

– Pregúntale a tus padres – le digo con indiferencia, podría decírselo, pero no es mi deber, es el de sus padres y no quiero discutir luego con ellos por meterle “ideas” que puedan corromper la inocencia de su querido niño.

– Ya lo hice y me dijeron, que una cigüeña los trae de París – Ya, enserio le dijeron eso.

– Y supongo que tu no les crees – menudas tonterías les siguen metiendo a los niños, temo por el futuro de mi sobrino.

– Mmmm… No, no es eso, quería preguntarte ¿Que es una cigüeña? ¿Como le hacen las cigüeñas para hacer bebes? ¿Y por que vienen de París?, pero porque me preguntas si no les creo, ¿a acaso me mintieron? – 

¡Vaya!, tiene un mecanismo nato de reflexión, eso es un rayo de esperanza.

– Se lo iba a preguntar a papa y mama, pero dijeron que iban a comprar algo al mercado y luego se fueron– 

A si que los muy cobardes huyeron, supongo que ahora estarán discutiendo sobre que le dirán al niño para que no pregunte mas sobre el tema. ¿Qué debería hacer? Tal vez le diga la verdad, después de todo no tiene nada de malo, ni vergonzoso y entre mas rápido lo sepa mejor será para el. Por otro lado tendré que aguantar el enojo de mi hermano y mi cuñada  por meterme en lo que no  me importa, que si el niño es muy pequeño, que el todavía no entiende este tipo de cosas, que ya lo sabrá cuando sea mayor, etc. Todo ese tipo de estupidas ideas preconcebidas, como si los niños fueran idiotas. Tal vez sea mejor seguir la corriente, pero si voy a mentirle a mi sobrino, al menos le mentiré con estilo.

– Este… ,no, no te mintieron… pero comencemos por partes... La cigüeña es un ave grande de plumas blancas y con un largo pico de color anaranjado, son muy inteligentes y su platillo favorito son las ancas de rana. Y que ¿Cómo hacen los bebes la cigüeñas?, pues la verdad es que nadie lo sabe, las cigüeñas son muy celosas en cuanto al proceso que utilizan para fabricar bebes…

– ¿Y por que? –

– Pues porque si nosotros llegáramos a descubrir el secreto para hacer bebes, podríamos fabricar bebes por nuestra propia cuenta y ya no necesitaríamos a las cigüeñas, y has de saber que les pagamos unas cantidades enormes de dinero para que hagan bebes, de echo la industria de los bebes es controlada exclusivamente por las cigüeñas, es una de las industrias mas rentables y productivas del mundo la “Storks Industry For Mass Production of Human”.

Durante siglos hemos intentado arrancar el secreto de la fabricación de bebes de sus largos y asquerosos picos, pero todos nuestros intentos han fallado. Innumerables espías han muerto a manos de sus anaranjados picos, incluso hemos librado guerras contra su enorme monopolio industrial en lo que se conoce como los meses sin plumas, cuando bloqueamos los embarques de ancas de rana a sus principales ciudades, como una medida de presión para que nos dijeran su secreto, pero todo fue en vano, las cigüeñas obtuvieron la victoria pues usaron su tecnología en la fabricación de bebes, para fabricar ancas de ranas y ahora también son las dueñas de la industria de las ancas de rana. La guerra comercial termino por temor a que las cigüeñas se apropiaran de más mercados de producción.

Al final solo hemos logrado hacer conjeturas sobre el proceso de producción que utilizan para fabricar bebes, una de las teorías mas aceptadas en el pasado era que tenían una fabrica gigante de producción de humanos en serie, donde millones de parejas son obligadas a mantener relaciones sexuales con el fin de tener el mayor numero de hijos posibles. En el auge de esta teoría todos los chicos querían trabajar de grandes en esas fábricas.

Pero con ese proceso es imposible mantener la demanda actual de 94, 608, 000 de bebes al año, así que la teoría mas aceptada actualmente es que las cigüeñas tienen unos laboratorios subterráneos gigantescos donde tienen decenas de millones de contenedores esféricos que simulan el útero materno y donde se clonan ahí a los humanos, con base en un código genético que se mantiene variable gracias a la síntesis de ADN que hace un superordenador que mete variables al azar en cada genoma que sintetiza a través de una impresora de ácidos nucleicos, con el fin de no perder la variabilidad de la recombinación genética y que así no nos parezcamos los unos a los otros.
Otra teoría, que tiene tantos seguidores como la otra, es que tienen unos laboratorios inmensos de fecundación in Vitro, donde recolectan óvulos y espermas de unas granjas que tienen al lado, fecundan los óvulos con técnicas a un desconocidas para nosotros de tal forma que la cantidad de embriones sanos que logren implantarse en el útero femenino sea del 100%. De esta forma insertan 7 embriones por mujer y después de 9 meses cada mujer de su granja dará a luz a 7 bebes sanos, listos para ser repartidos por el mundo. Así la producción podría aumentarse exponencialmente con solo aumentar el número de mujeres.

Y en cuanto porque vienen de París pues es simplemente porque la principal fabrica de producción se encuentra ahí. ¿Tienes alguna pregunta? – Mi sobrino me mira sorprendido y con cara de que estoy loco, supongo que era de esperarse.

– Si, ¿Qué es el sexo? –

Se oye que abren la puerta de enfrente y oigo claramente la voz del idiota de mi hermano que grita el nombre de mi sobrino, parece que quiere hablar con el.

– Mira parece que ya llegaron tus padres porque no les preguntas – Camino lo mas disimuladamente hacia la puerta del jardín, espero escapar a tiempo.

lunes, 5 de marzo de 2012

Miedo al cambio


El universo es inmenso y nosotros somos meras motas de polvo en un desierto infinito, por eso nuestra existencia jamás sabrá de sucesos que ocurren en lugares distantes, en otros universos, en otras dimensiones. Pero no hay que ir tan lejos, nuestra percepción es tan pequeña que en nuestra vida creamos un pequeño mundo a nuestro alrededor, con fronteras bien definidas, nunca vemos que hay mas haya de estos límites mentales autoimpuestos, simplemente porque no podemos, para nosotros lo que nos rodea y alcanzamos a ver es lo único que hay, lo único que existe.
 
Claro que sabemos que hay cosas mas haya de nuestro pequeño gran mundo, sabemos que hay otras personas, otras ideas, otras culturas, otros mundos, pero esto no es nada mas que un concepto, una certeza, para nosotros no alcanza un significado real hasta que estamos frente a este nuevo hecho, cosa o idea. De niño te enseñan que las vacas hacen muuuuu... y dan leche, te enseñan como es la vaca, su aspecto físico, su forma y entonces sabes que es una vaca, pero en ese momento no es mas que una idea. Es hasta que te llevan a una granja a conocer una vaca, que veas con tus propio ojos, como es su verdadera forma, color, tamaño, el olor real de una vaca, que esta idea cobra un sentido diferente, se convierte en un echo, se convierte en parte de la realidad, de tu mundo. Por ejemplo la primera vez que observe la imagen de un unicornio, creí que de verdad existían este tipo de criaturas, y tuve esa idea por varios años, hasta comprobar que ni en las granjas, los zoológicos, ni en los circos tenían unicornios. No fue hasta contrastar la idea que tenía con la realidad que esta idea pasó a ser una realidad, un hecho, el hecho de que los unicornios no existen.

En nuestro pequeño mundo nos sentimos a salvo, seguros, porque nos hemos acostumbrado a su presencia, su relativa continuidad, conocemos cada palmo, cada rincón del espacio que nos rodea. Es por ello que cuando debido a una serie de sucesos aleatorios un objeto, una idea, una persona o un concepto ajenos a nuestro mundo cae en el, nos asustamos, sentimos miedo, curiosidad, emoción, porque esta cosa nueva puede alterar de alguna forma la existencia que hemos creado a nuestro alrededor, puede alterar nuestro mundo y nosotros la mayoría de las veces no queremos eso, no queremos que nos muevan de nuestra segura comodidad, de ahí nace el miedo, el miedo de perder la comodidad que tenemos en ese momento, el miedo al cambio.   

Este miedo lo siento mas seguido de lo que me gustaría, al participar en clase, al hablar con una persona que acabo de conocer, al ir a algún lugar desconocido. Es un miedo presente y constante, claro no es un miedo paralizante, ni profundo pero es molesto y obviamente tienes que hacerle frente o no puedes si quiera salir de tu casa, pero es una lucha constante y muchas veces es desgastante. Al final te acabas acostumbrando al miedo que produce el cambio, no se si eso es lo correcto, pero acostumbrarme a esa sensación de nerviosismo y hormigueo intenso en el estomago, no ha sido tan malo, hasta me ha empezado a gustar, aunque me produzca indigestión. Talvez con el tiempo esa sensación se convierta poco a poco en emoción y me haga la vida un poco más fácil, eso espero, aunque se que tendré que aguantarlo un largo tiempo, mas del que me gustaría. La inevitabilidad del cambio, ¿Por qué no puede ser un placer?   

Pero hay veces que me he encontrado personas y he visto conductas en la sociedad, donde este miedo se ha metido en la medula de la conducta, se niegan a cambiar tradiciones o rutinas que son destructivas, la simple mención de un cambio en la forma en que hacen las cosas los altera de forma desproporcionada, como si la forma en que viven fuera la única que debe hacerse, la única correcta, critican y desprecian a las personas que no piensan como ellos, son personas amargadas, estancadas en un solo sitio, son inflexibles e intolerables, solo piensan en si mismos, despreciables en alguna medida, piensan que el mundo debería amoldarse a su forma y cuando esto no sucede expulsan odio por sus granos de carácter pululados de pus. Odio a ese tipo de personas, las odio en serio y me asusta cuando reconozco a alguien de ese tipo en algún puesto público. Muchas de mis fantasías me incluyen con superpoderes con los cuales asesino de forma llamativa y enferma a todas las personas de ese tipo que conozco, creo que el mundo seria un mejor lugar sin ellos.